jueves, 22 de agosto de 2013

22 de Agosto Renunciamiento







El 22 de agosto de 1951 el temple de una mujer amada por su pueblo se puso de manifiesto en toda su dimensión.
Eva Perón, en un acto multitudinario -el más grande que se había visto en la Argentina-, y ya con el cáncer a cuestas que comenzaba a carcomerla, tuvo, en una verdadera asamblea popular, uno de los diálogos más profundos y emotivos con su gente.
Desde entonces, ese día ha quedado en la historia de las luchas populares como el Día del Renunciamiento, marcando a fuego una comunión entre esa mujer y su pueblo que aún hoy,  años después, conmueve por la sinceridad.
Evita, en el Cabildo Abierto convocado por la CGT en las avenidas 9 de Julio y Belgrano de Buenos Aires, frente al entonces Ministerio de Obras Públicas, ante el anuncio de que se le ofrecía ser candidata a vicepresidente del general Perón en las siguientes elecciones del 11 de noviembre le habló así a más de un millón y medio de trabajadores:
Hoy, mi general, en este Cabildo del Justicialismo, el pueblo que en 1810 se reunió para preguntar de qué se trataba, se reúne para decir que quieren que Perón siga dirigiendo los destinos de la patria”.